La fundación, capitulo III


El prior estaba hasta las narices de discutir con el conde de Castro Altivo. Era mas terco que un cabrito. Ya no había sitio en el cenobio para mas gente. Además los chicos crecían y se convertían en hombres y mujeres con los consiguientes problemas que ello acarreaba.¡Que eran hermanos por Dios bendito!. Al menos hermanos de padre y como poco primos. No debía haber cópula bajo ninguna circunstancia. Lo mejor era la solución  que el había ideado inspirado por el Señor, por supuesto: crear un pueblo alrededor del castillo y del cenobio e ir trayendo jóvenes de ambos sexos de otros lugares amen de enviar algunos de aquí al resto de cortes donde hubiera bastardos recogidos en monasterios, como los nuestros.   
Hoy ya los había en casi todos los reinos; el mantenía contacto con monjes y monjas que habían criado varios y comenzaban a tener el mismo problema.
Construyendo una villa al abrigo del castillo y asentando a los jóvenes constituidos en familias de hidalgos bien educados y formados, podían vivir, dándoles algunos siervos, de las tierras sin labrar y sin provecho con las que contaba el conde, pagándole diezmos y primicias, y de este modo lo improductivo se tornaría en beneficioso para todos y se terminaría con el problema del mas que posible incesto, además de aumentar la población del reino. Siempre como Dios manda. Cuando hubiera excedente se les podía enviar a las marcas como repobladores. Son gente instruida, disciplinada  y hábil en el manejo de las armas. Resultarán útiles en cualquier parte. Es cuestión de organización como lo ha sido hasta ahora.
__Tengo que solicitar permiso del rey.
__Pues no esperéis mas os lo ruego conde. Por favor. Si sois buen cristiano daros cuenta de que así no podemos continuar. El peligro de pecado mortal es inminente.
El conde emprendió el camino de muy mala gana; tuvo que ir en busca del rey al palacio de verano. Sirgo estaba enfermo y apenas podía moverse del lecho. Adolorida había hecho volver a su sobrino Alfonso y estaba negociando con los nobles del Consejo para que fuera elegido rey a la muerte de su tío, evitando así que el bastardo Maragato se hiciera con el poder. Había reticencias porque los partidarios de Venanciano que habían participado en el asesinato del padre del infante, temían represalias. El rey no recordaba a aquellas alturas, haber tenido hijos naturales ni menos aun que existiera el tal fundo en las tierras del conde. Castro Altivo, un poco desesperado habló con la dueña García, para que ella tratara con la reina del asunto.
__Podéis hacerlo vos. Mi reina esta al tanto de todo.
__¿Ah si?. ¿Desde cuando?.
__Desde hace mucho.
Adolorida hizo un merecido alto en las negociaciones y atendió al noble. Le pareció bien tanto la fundación de la villa como el enviarlos a repoblar las marcas.
__¿Que fue de los primeros recogidos, los hijos de mi padre?. Esos ya peinan canas.
__Creo que la mayoría casó con gente de la villa cercana. No eran demasiados. Fueron fáciles de controlar. El prior lleva un censo de todas las familias, no les pierde la pista bajo ningún concepto. Otros profesaron como frailes y como monjas
__Supongo que lo harían por propia voluntad.
__Estoy seguro que así fue, señora.
A Castro se le había ocurrido algo durante la espera: los bastardos eran jóvenes aguerridos que manejaban la espada con mucha destreza y a los que se les había inculcado el sentido del deber sobre todo, como hijos de rey que eran.
__Formaré un grupo de elegidos, junto con los llegados de otros reinos y nos presentaremos aquí para contribuir a forzar la elección de Alfonso.
__Hecho.
 El conde era guerrero por naturaleza y durante la paz conseguida por Sirgo echaba de menos las continuas escaramuzas de antaño. Esto de ahora no era vida para un caballero. Parecía una dueña al cuidado de los bastardos. Regresó a toda prisa lleno de ilusión, para ponerse manos a la obra.

Mientras el prior, hombre práctico, se había ocupado de ordenar construir una empalizada bien afilada para cercar el perímetro de la villa defendiéndola así de curiosos y ladrones. Los vástagos  de otros reinos comenzaban a llegar, incluso los reyes habían concertado los casamientos de sus descendientes ilegítimos, excepto Sirgo que estaba moribundo y además era bastante despreocupado para estos asuntos. El prior creó una comisión encargada de recoger los convenios de boda y de acomodar debidamente a los jóvenes hasta que todo estuviera dispuesto. Cada novio o novia venían con su correspondiente dote en metálico-no podía ser de otro modo dadas las circunstancias. No podían concederles territorio, ni títulos- y por ello viajaban acompañados de un amplio sequito armado hasta los dientes.
Como las futuras moradas aun no habían sido construidas se albergaron entre el monasterio y el castillo. Entre tanto, los escoltas acamparon en la explanada entre el castillo y el río donde iba a levantarse la futura villa, para la cual el prior, hombre ocurrente, ya tenía nombre: Natural de Rey; y el gentilicio: naturales de rey.
Lo que eran; ni mas, ni menos.

Ocurrió que los acontecimientos se precipitaron en la corte allende la montaña; el rey murió como se preveía. La reina dispuso las exequias, el duelo y la sucesión, pero Maragato mientras duró la agonía del padre no se había concedido tregua. Desde su obligado exilio, envió emisarios al emir mas cercano, solicitando ayuda para alcanzar el poder, poniéndose a cambio a la entera disposición del moro para lo que hubiera menester, pagando tributo incluso, siempre que fuera razonable. 
El emir aceptó exigiendo como pago, aparte la alianza entre ambos reinos, un impuesto peculiar y miserable: la entrega de cien doncellas cristianas cada año. A Maragato le pareció barato y aceptó encantado.
Puestos los sarracenos en marcha hacia el norte,  para caer sobre el ejercito del príncipe Alfonso, una avanzadilla divisó la concentración, en los terrenos del conde,  de lo que creyeron tropas preparadas para acudir a ayudar al sobrino del rey. El caudillo y sus asesores acordaron, camuflar un reten bien nutrido entre la corte y el castillo,  a fin de neutralizarlos a medio camino.  La batalla resultó desigual debido a la sorpresa y a la desproporción; los bastardos, pese a luchar con arrojo y disciplina, fueron diezmados, el conde muy mal herido y todos los planes del prior desbaratados, por un error de interpretación, en un abrir y cerrar de ojos.

En la Corte la suerte no fue muy diferente. Alfonso perdió la batalla y tuvo que huir a toda prisa hacia la tierra vascona de su madre. Perseguido por Maragato en persona, el príncipe contó con el valioso y valeroso auxilio del pueblo, partidario de su padre en su mayoría, que le albergó y  acompañó por montes y vericuetos para que lograra eludir la muerte segura que le aguardaba como le cayera encima el bastardo que le pisaba los talones. Adolorida y su hija soltera fueron recluidas por la fuerza en un convento de monjas de clausura perdido en un valle en medio de la nada. El yerno del rey resultó muerto en combate y su esposa expulsada de sus tierras con sus hijos. Maragato subió por fin al trono.
¡Cuanta razón tenía doña García! Pensaba  Adolorida en sus días de claustro forzoso. El nuevo rey era un bastardo de mierda y su estirpe una caterva de matarifes. ¡Que lástima de dinastía!.
Por suerte para las doncellas solamente reinó tres años. Alfonso regresó por sorpresa con un poderoso ejercito, reconquistando el trono, aprovechando que el emir aliado andaba en luchas con otros reinos cristianos. Maragato pereció en plena batalla.


En estos años, el conde falleció de resultas de las heridas de la emboscada. Su hijo mayor y heredero dio carta blanca al prior para que hiciera con la villa lo que le diera la gana y le dejara en paz de bastardos y de bodas.
El buen fraile, todo tesón y voluntad, se puso manos a la obra sin descanso. Hubo que rehacer muchas parejas con el consiguiente problema de las dotes, porque muerto en batalla el cónyuge pactado se hizo necesario negociar con cada reino la boda de la novia con otro candidato. Las mas de las veces, no podía ser hijo del mismo rey, porque no había mas varones o no eran aun casaderos y había que concertar enlace con pretendientes de otros feudos. Fue preciso una complicada estrategia porque las monarquías cristianas no se llevaban bien entre si, como hubiera sido aconsejable, y sucedía  a menudo que cuando se llegaba a un acuerdo, los reinos rompían hostilidades antes del casorio y éste debía suspenderse y convenir otra unión con otra corona. 
Mientras, los dineros de las dotes permanecían a buen recaudo en una especie de banca que el prior mando fundar a un judío de Toledo de nombre Jacob que se dejo caer por aquellos lares, huyendo de un mercader al que administraba los dineros, las propiedades  y a su mujer, asunto este último que a punto estuvo de acarrearle graves consecuencias. Cuando por fin la villa estuvo en marcha, los réditos de los dineros acumulados eran cuantiosos. 
El monje y el judío acordaron entonces, constituir una fundación para distribuir equitativamente la riqueza, institucionalizar disposiciones, normas, deberes y derechos y para que se reconociera la procedencia regia de los naturales de rey y quedaran así, legalmente amparados. 
Se redactaron declaración y estatutos que fueron sancionados por todos y cada uno de los monarcas representados o sus sucesores en documento que cita la Crónica fechado en Natural de Rey en agosto del año 800, reinando Alfonso II. Unos meses después de ver culminado su proyecto falleció aquel buen prior.
El mayor de sus hijos le sucedió en el cargo.


 Continuará...


La fundación, capitulo II



Según afirma la Crónica  Lisboense- desechada durante siglos por estar escrita en un mal latín, pero absolutamente veraz-estos hechos sucedían a menudo en esa corte y en otras muchas; incluso en moradas de mas baja categoría, episodios de esta índole u otros parecidos eran moneda corriente, aunque estos no los recoja la Crónica ya que carecen de importancia para el hecho que nos ocupa.. Eran años muy difíciles. Las diferentes monarquías europeas se estaban asentando y los bastardos sólo traían problemas si se les dejaba crecer. Bien lo iban a saber, por desgracia, la reina Adolorida y el infante Alfonso, desde cuya corte partimos para este relato. Pero por suerte existen los adelantados; esa gente preclara que, aprendiendo del presente, sabe prever el futuro y tomar medidas a tiempo aunque sean dolorosas.
Mas vale muerte callada que desventura publicada, dice el docto refranero popular; o que llore el hijo que no el padre, pudiéramos decir mas bien, ya que en la historia que referiré a ustedes, atentos lectores, nadie mandó nunca matar a los hijos. Si murieron mas tarde fue porque así lo decidió el azar o las circunstancias, no la corte en ningún caso. Además, lo que en principio fue simple salvaguarda de la paz dinástica,  costando buenos dineros a las arcas reales,  se convirtió con los siglos en un negocio rentabilísimo que aun perdura y que vuestras avispadas mentes asociarán  enseguida con casos conocidos en las monarquías mundiales, aunque algunos pensaran por ello, que es puro oportunismo por mi parte que no teniendo nada mejor que contar echo mano de una conspiración mundial que solo a mi me consta.
Deben creerme sin dudarlo; yo soy tan de fiar como la Crónica Lisboense, dado que como ella, me desenvuelvo mal con el latín y esto constituye en la escala de la credibilidad histórica, el mejor y el mas ponderado de los avales.


En la corte de un reino cualquiera de los que había en España
Año del señor de 779





El invierno estaba siendo mas crudo de lo normal. La nieve había llegado acompañando a la corte, con intenciones de permanecer también en la pequeña villa, que lucía por ella blanca e inmaculada; pero bajo el prestado manto continuaba igual de inhóspita, sucia y mostrenca. Todo era muy reciente y aun no había tenido tiempo para adaptarse a los nuevos y señoriales vientos. Ni los monarcas para hacer reformas, a todas luces necesarias.
 En palacio ardía buen fuego en cada una de las habitaciones pero así y todo el frío se colaba por cada rendija. De vez en cuando, el viento se entretenía en abrir un ventanal y entonces una corriente gélida invadía la estancia, apagando hachones y velas, como si una legión de almas de otro mundo, mas cohibidas que amenazantes, se hubieran transportado a este, con orden de dejar ateridas a la reina Adolorida y a sus damas.
__Son los ángeles__suspiraba una dama de nombre Gumersinda, que aun no se había maleado en la corte.
__Son demonios__opinaba Teodomira, que ya había sido lanceada en varias plazas.
__Vendrán como mucho del purgatorio__opinaba doña García mientras cerraba__ Con esta cola de hielo es imposible que vengan del infierno.
La dueña García no era muy dada a creer en seres celestiales. Por nada en particular, era descreída, sin mas.
__Además ¿para que se iba a molestar el señor diablo?, con Maragato ya tenemos suficiente representante del averno.
__¡Doña García!__ reprendió la reina__que es mi hermanastro.
__Es un morángano de mierda, mi señora. Un bastardo. Un asesino. Mi señor rey, Alfonso, sucumbió a los encantos de Sisalda la esclava  mora- puedo entenderlo porque era bastante mas guapa que mi señora reina Emersinda y mucho mas larga, también_ pero nunca debió de criar a su hijo en la Corte. Ese bastardo jamás debió crecer en la casa de su padre. Por su ambición y sus malas artes hemos tenido que salir huyendo de la anterior corte y venir a vivir a este pueblo infame. Claro que tus hermanos tampoco salieron mejores. No se si fue el diablo u otro ser aun mas depravado quien indujo a Froilan a asesinar a Venanciano. ¡Casta de matarifes!. Menos mal que los niños, vuestros sobrinos, están en Galicia con los buenos frailes. Aquí no aprenderían nada bueno.¿Por cierto, cuando regresa el rey?.
__Cuando el tiempo lo permita y el lo tenga a bien.
__¡Ay Señor, Señor, cuanto viaje y cuantas ausencias y que largas!…
__Doña, ¡déjalo ya!__ordenó la reina__y no afiles mas la lengua o cualquier día te cortará la boca en dos mitades.
La dueña hizo ademán de cerrarse la boca con llave y guardó silencio.

Era casi la hora de la cena. La reina y sus damas se disponían a recoger sus labores. Adolorida se dirigía a ver como se encontraba su hija la infanta Matilda postrada en el lecho, invadida como cada invierno por las  flemas,  y agravada por el frío de la huida, cuando unos gritos desgarrados avanzaron por el largo pasillo del lóbrego y todavía bastante sucio, palacio real.
__¿Quien gime así?__preguntó Adolorida.
La puerta se abrió con violencia lo que propició otro apagón con la corriente. Una de las damas de la reina que acababa de dar a luz apenas hacía unas horas se precipitó de rodillas ante ella. El rubio cabello le caía sobre el rostro y sudoroso como estaba por los esfuerzos del reciente parto, se amalgamaba con las lágrimas formando un amasijo impropio en una dama como ella. Cuando volvieron a arder las antorchas y la reina contempló el aspecto de la joven, puso cara de repugnancia.
__Señora no está. Me lo han quitado. No está mi hijo, señora. Me lo han robado mientras yo me quedé adormecida. No está. Señora, piedad. Como los anteriores. Ya no lo podré soportar.
__Te está bien empleado por puta—se dijo para si doña García.
__Vamos a ver Griselda. Alguien lo habrá cogido por algún motivo. Tiene que estar en palacio. No perdamos la calma. Doña García ordena que atranquen la puertas, que nadie pueda salir y que se presente el jefe de la guardia. ¡Rápido!. Vamos a ver, mujer, haz memoria, ¿Quién había contigo? A lo mejor se llevó al niño un momento para que lo viera su padre, por ejemplo…
__Eso si supiera quien es__apostilló  doña García regresando acompañada
 de Sisebuto el jefe de la guardia personal de la reina. Adolorida iba a decir algo pero la dueña se adelantó.__Conocer al padre lo mismo facilitaba las cosas. Podría habérselo llevado él o su familia.
__Pudiera ayudar, si__apostilló Sisebuto que tenía aspecto de oso.
__Tú callado__ordenó la dueña, doña García
Griselda miró a la reina. Era un poco embustera la muchacha.
__No lo se mi reina. No se quien es el padre. Uno de los emisarios del reino vecino que vinieron meses ha a entrevistarse con mi señor el rey Sirgo, me tomó por la fuerza.
__Pero si eran frailes. No blasfemes insensata.
__No lo hago doña García. Fue así, lo juro.
__Con alguien mas yacerías. Es mucha puntería quedar preñada a la primera. Las otras tres veces te pasó lo mismo. Es un castigo de Dios que tus hijos desaparezcan.
Griselda gimió a pleno pulmón, con mas rabia contra la dueña que pena por la pérdida.
__Veamos Sisebuto, registra personalmente el palacio de arriba abajo. Que nadie entre ni salga hasta que aparezca el niño. Acabamos de llegar, la otra corte no era segura, pero esta… En La Pobla  habían desaparecido veinte si no llevo mal la cuenta. Son demasiados. No puede ser que se evaporen. Alguien tiene que saber algo. Tiene que haber un culpable.
__No si haberlo, haylo.
__¿Que quieres decir dueña?
__Nada mi reina.

Adolorida despidió a sus damas. Cuando se quedaron  a solas mientras las jóvenes acompañaban y trataban de consolar a la reciente madre, la reina que podía ser un poco ingenua pero que no era tonta, preguntó a doña García.
__¿Son hijos del rey?.
__Puede__Respondió García sin sorprenderse por la pregunta.
__¿Son o no son?
__Si. Pero puede acontecer como en el caso de hoy, que las damas tengan mas amantes y no haya seguridad.
La reina obvió la observación.
__¿Todos los desaparecidos son hijos del rey?
__Si. Pero…
__¿El ordena que desaparezcan?.
__No
__¿Y bien?
__Siempre sospechamos de Venanciano y una vez muerto, de Froilan, pero una vez asesinado también,  comenzamos a sospechar de Maragato. Sin embargo, debo decir para no sentirme tan vil como ellos, que no son los culpables de las desapariciones. Al menos no directamente.
__¿Mueren los pobres niños?__ Preguntó Adolorida con un hilo de voz.
__No mi reina. Puedo juraros que los niños son entregados a alguien y ese alguien los mantiene con vida. Es mas, puedo juraros que los niños son instruidos como si fueran hijos de rey.
__Que es lo que son en realidad.
__Son hijos de puta.
__¡Doña García!
__Perdón señora.
La reina Adolorida se sentó al lado del fuego. La dueña, aunque se temió lo peor, permaneció de pie.
__Estoy esperando que me cuentes.
__¿El que mi reina?.
__No te hagas la tonta. Todo cuanto sepas de los nacimientos y las desapariciones.¿Quien se lleva a los niños y adonde?. Has dicho que puedes jurar que son bien atendidos. ¿Qué sabes?. ¡Habla, rápido!.
__Solo se que alguien se encarga de llevarse a los bastardos y sacarlos de palacio. Alguien que cuenta con autonomía para moverse a su antojo y con poder para disponer en nombre de la corte. Os juro por mi pobre madre que no se de quien se trata. Creo que, en principio, los niños son entregados a un fraile. Este los lleva a su destino el cual ignoro, pero me consta que los niños y niñas son educados y tratados como nobles.
__O sea, que el rey está al tanto. Mejor haría fornicando solo conmigo, como por otra parte es su obligación y dejando en paz a mis damas.
__Es que ellas son muy putas, mi reina.
__¿Que pueden hacer si el rey las requiere?. Negarse les traería muchas complicaciones. No culpemos a quien solamente intenta sobrevivir.
__Sois muy generosa mi reina.
__Soy realista, aunque todos me tengáis por tonta. Así que según tu es imposible recuperar a los recién nacidos una vez que son sacados de palacio y esto ¿se hace desde ahora o ya se hacia en tiempos?.
__Veréis__doña García se sentó; el relato iba para largo y ella con el frío y la huida no tenía piernas para tanto__ cuando crecieron vuestros hermanos pusieron el grito en el cielo, porque en buena ley dinástica Maragato, el bastardo, era anterior a ellos y por tanto tenía mas derechos. Intrigaron con vuestro padre, lloraron, suplicaron, aunque mi señor el rey les hizo recordar que la monarquía es electiva y por tanto cualquiera de los tres podría ser elegido rey. Vos señor podéis imponer a quien queráis. No es tan sencillo. El trono hay que ganárselo. Desde ese día los tres varones no se dieron tregua ni cuando dormían. Lo hacían con el puñal en una mano y la espada en la otra. Ni siquiera los hermanos de padre y madre se respetaron, como ya sabemos. Las disputas, los insultos y las peleas, con sangre incluso, se convirtieron en habituales. La corte andaba soliviantada y dividida, tanto que los partidarios de unos y otros se enzarzaban a golpes o a lanzazos por menos de nada: una mirada aviesa era motivo para sacar a relucir los aceros y para que alguno terminara sus días con las tripas fuera. Menos mal que vos estabais en la casa de vuestro marido. El día a día en la corte era una tortura.
Aconsejado por este proceder, vuestro padre, mi señor rey, ordenó sacar de palacio a todos los bastardos tuvieran la edad que tuvieran. Así de expeditivo. Mejor prevenir que lamentar. Todos, excepto Maragato, que fue el primero de los hijos varones y era, además, su ojito derecho, mas por ser hijo de Sisalda que por méritos del muchacho.  Eso trajo algún que otro problema y acabó con la vida  de varios de ellos al resistirse al exilio unos y tratar de regresar a casa otros. Las criaturas, ya creciditas, murieron ensartados por los guerreros encargados de su custodia o perdidos por los montes, donde fueron devorados por lobos y osos. Esta dinastía es proclive a dejarse devorar por fieras, como sabéis vos, mi reina, mejor que yo.
Para evitar repetir estas desgracias, se tomó la decisión de llevárselos nada mas nacer. Y punto. Se constituyó una especie de fundo para darles asilo, con amas de cría y todo lo necesario. Es todo lo que se. Creo que está bien nutrido. Creo también, que no es el único que existe. Otras monarquías del país, acabaron por imitar la sabia decisión de vuestro padre.
Mientras, en palacio, como fuimos viendo, los infantes intentaron ganarse el trono a su manera: cuando vuestro padre y el suyo agonizaba, el segundo mató al primero, facilitando las cosas para que el moro, el primogénito en realidad, sólo tuviera que liquidar al asesino que era quien pugnaba con el por el trono, ayudado por los secuaces de Venanciano; y no mataron a sus hijos porque vos anduvisteis a tiempo. Cuando el Consejo eligió a vuestro marido como rey, el bastardo expulsado de la corte, juró acabar con todos en cuanto hubiera ocasión y nada mas la hubo, no le tembló la mano para intentar mataros a vos y todas nosotras que, desamparadas por la ausencia del rey,  tuvimos que partir a uña de caballo y llegar a este lugar infernal, donde eso si, estamos protegidas por una turba de matones, los mas desarrapados y zafios que he visto en mi vida. Espero que sean tan eficaces como necios.
__De momento han repelido a Maragato y sus huestes y parece que los han diezmado.
__Recemos para que regrese el rey y tome las medidas oportunas.
__Si, dueña. Recemos también por los niños robados. Para que alcancen su destino.
__Espero que no sea caer sobre la corte. No me fío un pelo de esos bastardos__ esto último lo pensó solamente para no incomodar la reina.

 Continuará...

La fundación




El presidente de la Transnacional era un hombre optimista; en consecuencia, el sesgo que acababa de tomar la conducta personal de las dos pupilas enviadas por la Fundación para consortes de sendos herederos de monarquías del Norte ( a quienes costaba encontrar pareja adecuada, tal vez por la vida tan frívola que llevaban últimamente los herederos y herederas ), le hizo vislumbrar el filón que la nueva situación les ponía delante de las narices. ¿Al fin y al cabo, cuál era el objeto de su organización?. Sustituir el estado por las finanzas. ¿Cómo lo habían conseguido? Manipulando donde y cuando conviniera; eternizando en el poder dictaduras o monarquías sangrientas para el pueblo pero fructíferas para sus intereses, haciendo que se abrieran al mundo viejos estados autárquicos y se integraran en las finanzas mundialistas, convirtiendo los poderes estatales de antiguos países marxistas en mafias agradecidas a sus leyes, financiando golpes de estado, asesinando presidentes, promoviendo revoluciones, etc, etc. Hasta el momento, las monarquías habían sido intocables, pese a dirigir la Transnacional un estadounidense o quizá por ello, nunca se sabe, pero en este momento de globalización extrema estas instituciones estaban demasiado caducas; ya no tenían sentido; eran como trasnochadas taifas perdidas en un universo uniforme y uniformado. Esto, que en el principio del cambio, las hizo indispensables para preservar la identidad de cada estado, las convertía con el devenir de los años y de los acontecimientos, en anacrónicas e inútiles.
Ellos ya se habían encargado de hacer que entraran en la modernidad tratando de corregir- es un decir- la endogamia típica de la realeza, buscando consorte adecuada entre los protegidos que integraban la FVI, organización antiquísima que había ido evolucionando desde su nacimiento en el siglo octavo y que ellos controlaban por completo desde finales del dieciocho. Ahora el destino se lo había servido en bandeja. Desprestigiar las instituciones monárquicas iba a ser el siguiente paso. Hasta este momento, algunas testas coronadas, con patrimonios importantísimos desde luego, habían formado parte de la Transnacional- solicitando apoyo incluso para librarse de consortes problemáticos que habían hecho peligrar seriamente la institución-y otros habían asistido como oyentes, sin voz ni voto, a las reuniones. Pero en este punto, una morena neurótica  bastarda del marido de su suegra y una pelirroja regordeta y ordinaria descendiente de reyes vikingos, habían levantado el banderín para la carrera cuesta abajo de toda la institución a nivel mundial. Lo que podría haber sido un grave problema terminó por transformarse en el punto de partida de la mejor de las soluciones.

A fin de que no se nos tache de ignorantes o de hipócritas, debemos reconocer para que conste, que jamás las monarquías habían cumplido la misión de ejemplaridad que fue su fundamento. Nada mas lejos de la realidad en todos y cada uno de los periodos históricos. Si acaso algún rey elevado a los altares en el siglo XIII, mas por su tenaz obediencia a Roma que por otros méritos.  Como todos conocemos, a través de los siglos, los reyes han asesinado, violado, matado de hambre a sus vasallos, robado, saqueado, traicionado y apostatado sin que se les cayera el cetro de las manos, y los súbditos en su inmensa mayoría, les continuaron adorando como si fuera irrefutable que se hallaran investidos de poder divino y esto les hiciera, en consecuencia, dueños absolutos de vidas y haciendas, otorgándoles patente para hacer su santa voluntad, casi siempre contraria a los intereses del pueblo, hasta que el paso de los siglos les fue encaminando a lo que son ahora- no todas, por desgracia para sus súbditos-: Monarquías Parlamentarias, habiendo perdido por el camino la mayor parte de sus privilegios y prerrogativas y habiendo contribuido muchas de ellas, motu proprio o porque a la fuerza ahorcan, a la llegada de nuevos aires de libertad a sus reinos.
Tras haberlos jodido por los siglos, fueron al final, los redentores. Y todos tan contentos.
Haré aquí un inciso para aclarar algo apuntado mas arriba: Dirán ustedes que como una organización tan importante y seria casa a una hija bastarda del príncipe consorte con el hijo legitimo de dicho príncipe. Verán, el joven es hijo de la reina, pero no tiene por que ser hijo  del marido de la reina ¿captan el matiz?. La Transnacional es en efecto muy seria para que se le pase por alto algo así.
Y si, la reina puede ser algo, bastante o muy ligera de conducta (observen que he obviado, con elegancia, el termino puta, demasiado vulgar para estas esferas) y el príncipe consorte no digamos, pero los descendientes y sus cónyuges, mientras no ciñan corona mas les vale observar una conducta adecuada por no decir ejemplar, dado que carecen de la inmunidad que proporciona la jefatura del estado y nadie esta obligado, por ello, a mirar para otro lado. De ellos hacia arriba, sin embargo, es aconsejable, por no decir preceptivo, hacer la vista gorda.
Privilegios que aun conserva la institución, tolerados con benevolencia por los diferentes Parlamentos y de los que se va a aprovechar la Transnacional.

El vicepresidente no era tan optimista como el señor Rainfalling. Se llevaba la mano al corazón. Otra metedura de pata mas y el no lo resistiría. La nuera de la reina, madre del futuro rey,  pillada en la cama con un príncipe hindú, fotos incluidas, oscuro de piel además y la pelirroja nuera de rey, posando desnuda en Play Boy, mostrando sus excesos con absoluta desvergüenza; claro que en la época de las fotos aun era soltera pero ¿como se pudo pasar por alto una cosa así?. ¡Oh, my God!. Luego esa escoria de periodistas buscando tres pies al gato: que si consume drogas, que si hacía streepteese de joven en un local cerca de su colegio, con los chicos metiéndole dinero por el tanga ¡mon Dieu! que bochorno. ¿Cómo hemos podido pasar por alto algo así? y una vez sabido ¿por que no se compraron esas fotos antes de que se publicaran o se interceptó al propietario?…por Dios bendito…George. ¿Cómo hemos caído tan bajo?. ¿Qué ineficacia es esta?. Nos hundimos.
__ No sufras, tal vez todo esto sea en beneficio de la Fundación. Los senderos que el Señor nos muestra son, a veces, sinuosos. Pero sabemos que El nos lleva de su mano.
Rainfalling, adoptó ademán y entonación de profeta. Había sido actor en la universidad.
__ Tal vez desacreditar las diferentes monarquías sea el camino de ahora en adelante.
__ No comprendo para que.
__ Para que desaparezcan.
 __Y ¿Por quien las vamos a sustituir?
__ Por jefes de estado de los nuestros, claro está.
__ Sigo sin comprender. Las monarquías ya son de los nuestros…
__ Si, pero son peligrosas.
George Rainfalling encendió un habano; tenía que reconocer que en la isla se seguían elaborando  los mejores puros del mundo. Miró por la ventana con melancolía. La mirada viajó hasta la La Havana; entró por el Malecón, llegó a Jaimanitas, alcanzó el Punto Cero y tropezó con la de Castro. El presidente de la Transnacional dio un respingo. Era uno de sus mayores fracasos. Carraspeó, observo el humo del cigarro y regresó a Washington y a las monarquías. El vicepresidente guardó el habano para otro momento en el que hubiera algo que celebrar y volvió a preguntar.
__¿Por qué son peligrosas?
__Representan las últimas utopías. Continúan fieles a si mismas con sus peculiaridades y su boato, ajenas por completo a la uniformidad que las rodea.  Los pueblos pueden tratar de dar marcha atrás y agarrase a ellas en un momento dado  como formula para recuperar su idiosincrasia. Los pueblos son volubles y se rebelan, no lo olvides. Ahora están muy acojonados por la falta de dinero y la perdida paulatina de sus avances sociales, pero tiempo al tiempo.
Rainfalling hizo una larga pausa.
__Son peligrosas, te lo digo yo.
El presidente tomó asiento con estudiada naturalidad en el Chesterfield de su despacho, saboreó el habano y prosiguió con la disertación sobre las monarquías y los pueblos, ajeno por completo al desasosiego que su elaborada manera de exponer los hechos causaba a John Oldriver, su vicepresidente.
__ Tal vez ahora mismo no es el momento John, pero cuando la sociedad pierda por completo  los privilegios de los que goza injustamente, se terminen por fin las vacas gordas y los gobiernos elegidos por los ciudadanos entre los candidatos mas obsequiosos, sean sustituidos por otros de tecnócratas cicateros impuestos por nosotros, cuando de verdad les apretemos las tuercas, cuando estén al borde de la asfixia…, entonces si, habrá llegado la hora de actuar con contundencia contra la institución, curándonos en salud. En momentos de duros sacrificios como los que les esperan,  los pueblos se sentirán defraudados y se volverán contra las monarquías si comienzan a aflorar trapos sucios y conductas poco ejemplares. No les perdonarán ni una.  Ya hay protestas por parte de quienes piensan que tienen muchos privilegios. Debemos continuar  haciendo lo de siempre, solo que procurando equivocarnos para no errar. He ahí el nuevo horizonte. ¿Me copias, John?.
__ Si, te copio, pero olvidas algo. Las monarquías son listas, en general. Conocen muy bien a los pueblos, saben rectificar y reconquistar la voluntad de sus súbditos. Es lo que vienen haciendo desde siempre. Es algo que bordan, sobre todo algunas…
__ Sabremos adelantarnos. No les dejaremos asidero. Los escándalos serán tantos y tan abrumadores que no habrá vuelta atrás. Cuando los pueblos quieran darse cuenta del complot, será tarde, como siempre, y habrán perdido definitivamente la partida.


Para seguir contando la historia y que se comprenda, debo hacer una digresión precisamente en este punto y referirles algo que hasta ahora permanecía ignorado por la humanidad, siendo desprestigiada, machaconamente,  la fuente de referencia por muy digna y fiable que fuera, que lo era,  y por muchos avales intelectuales e institucionales con los que contara, miles, como ocurre siempre que se quiere ocultar un hecho al mundo. Investigadores de la Universidad de Hollywood dieron con la clave hace decenios, es por esa razón que fueron borrados como institución académica, los docentes dispersados, los mas rebeldes desaparecidos, el campus sembrado de sal y ocupadas las colinas, como ya se sabe, por productoras de cine al servicio de la Transnacional.
Lo dejó sentenciado Cervantes: Cosas veredes, amigo Sancho.
Uno de dichos investigadores, tal vez el mas tesonero, fue, casualmente, uno de mis tíos bisabuelos o tatarabuelos- no lo tengo claro-esfumado sin dejar rastro en el mar de los Sargazos una mañana que salio a pescar barracudas desde el puerto de Oceanside en California. No extrañó a la familia esa divergencia dado que mi lejano familiar era un hombre muy peculiar cuando iniciaba una ruta. Influenciado por los grandes descubrimientos de la época (principios del XIX) y siendo aun muy joven se fue de la casa paterna con destino África para descubrir, por fin, el nacimiento del Nilo, ya que lo descubierto por Livingstone eran en realidad las fuentes del Congo. Tres años mas tarde fue recogido por un mercante noruego, en Ushuaia. Como habiendo comenzado viaje en Zanzíbar, terminó en Argentina buscando el Nilo, constituyó siempre un misterio familiar. El carguero lo desembarcó en Lisboa y yo sospecho que fue durante su estancia en esta ciudad cuando descubrió, o alguien le puso en contacto, con la Crónica Lisboense, a la que volveremos mas adelante ya que constituye el punto de partida de la investigación que nos ocupa. En el siguiente viaje se fue al ártico canadiense a investigar el pueblo inuit para tratar de zanjar la leyenda negra que pesaba sobre ellos al ser llamados despectiva y equivocadamente por los europeos: esquimales ( devoradores de carne cruda). No sabemos si llegó a su destino, pero lo cierto es que regresó a casa desde la isla de Pascua en el Pacifico sur, un año después. Mi bisabuela opinaba que esto era debido a un problema crónico de desorientación porque desde niño confundía la diestra con la siniestra, el septentrión con el meridión y occidente con oriente  y como a nadie se le ocurrió corregirlo, así continuó toda la vida. Por ello, todo el mundo dio por bueno que saliendo a navegar  por la costa del Pacifico se perdiera realmente en el triangulo de las Bermudas.

Retomando el hilo, sucede que algunas de las pertenencias de mi tío terminaron en la casa de mis abuelos- posiblemente traídas por él en sus visitas vacacionales- en cuyo desván hallé una tarde estos informes, cuando andaba buscando otra cosa, como suele suceder casi siempre. Iba a dejarlos en su sitio de nuevo, pero me llamó la atención el membrete de la Hollywood University. Pensé que se trataba de un guión cinematográfico, pero mi sorpresa fue en aumento a medida que leía.
No daba crédito.
¡Hollywood había sido en origen una universidad!; las colinas fueron en otros tiempos, el asiento de importantes centros de investigación en todos los campos del saber, donde convivían docentes y estudiantes de todas las nacionalidades conocidas. En aquellos años gloriosos para la institución, se estaban produciendo de continuo hallazgos inimaginables, incluso para los mismos investigadores, quienes se topaban muchas veces con hechos o consecuencias que ni estaban previstas ni se les había ocurrido que fueran posibles. De ese modo, junto con los laureles académicos, comenzaron los conflictos con las administraciones, los grupos de poder y las sociedades mas o menos secretas. El cenit de los hallazgos y los problemas lo constituyó el descubrimiento de la FVI.
Desde luego lo hallado era infinitamente mas interesante que un guión. Debo hacerles saber que soy muy aficionada a la  historia. Por ello, comprobé punto por punto cada fecha, cada personaje, cada batalla y cada dato histórico. Coincidían con una precisión milimétrica, pero lo mas fascinante era la historia paralela y desconocida que se narraba, pareada con la historia conocida. Algo increíble e inquietante.
El informe completo es farragoso al estar escrito con lenguaje académico, a veces poco inteligible y ser, además, muy minucioso y pormenorizado. Su lectura completa me ocupó años. Así que me he permitido hacer una sinopsis, para facilitar su lectura y darlo a conocer al mundo.
Hela aquí:

Informe de la Universidad de Hollywood sobre el nacimiento, desarrollo y globalización de la FVI ( Fundación Vástagos Ilegítimos) traducido, resumido y comentado por una servidora.


Continuará cada semana.