Todos sabemos que el rey emérito, don Juan Carlos, salió de España hace unos días, sin que sepamos donde se encuentra en estos momentos. Se dice que puede estar en la República Dominicana alojado por su amigo el "muchimillonario" cubano José Fanjul, de origen asturiano. Este magnate del azúcar con ingenios en Florida y en la República Dominicana, es pariente del emérito por la tangente. Lo explico.
Don Alfonso de Borbón y Battenberg, hijo mayor del rey Alfonso XIII, y tio de don Juan Carlos, fue Principe de Asturias desde su nacimiento. Hemofílico por herencia materna, paso media vida en cama, teniendo por ello una educación deficiente, poco adecuada para poder desempeñar las funciones que le correspondían por derecho.
En 1931, tras la proclamación de la República, sale con su madre y sus hermanos desde Madrid, en tren, hasta Francia. El rey había partido el mismo día que se proclamó la República. En Lausanne, Suiza, donde convalecía de una de sus crisis, conoce a Edelmira Sampedro Robato, cubana hija de cántabro y asturiana, dueños de plantaciones de azúcar en la isla. Por ser la novia plebeya y prohibir la Pragmática Sanción de Carlos III, los matrimonios morganáticos, el príncipe presenta a su padre la renuncia al trono, y se casa con Edelmira en 1933. La pareja se divorcia en 1938, sin haber tenido hijos. Al príncipe se le concede el título de conde de Covadonga.
Jose Fanjul, el amigo del rey, es nieto de una hermana de Edelmira Sampedro, y sobrino nieto del príncipe don Alfonso.
Don Alfonso vuelve a casarse con otra cubana de la que se divorcia un año después, sin haber tenido hijos tampoco. El príncipe fallece en Miami en un accidente de automóvil al salirse de la calzada y chocar contra una cabina de teléfono. El accidente no reviste mucha gravedad, pero don Alfonso sufre una hemorragia interna, que a causa de su hemofilia no se puede detener. En 1985 su sobrino, el ahora emérito, traslada sus restos desde Miami al Panteón de Infantes del Escorial. Con los restos del príncipe viaja su primera esposa Edelmira Sampedro, a la que don Juan Carlos considera de la familia.
Contaba mi abuela, que se tropezaba en La Habana con don Alfonso y su esposa Edelmira, por El Vedado, creo que en el Centro Asturiano, algunas veces. Siempre decía que don Alfonso era "elegante y distinguido, en cuanto lo veías sabías que era alguien especial. Tenía el encanto de su madre doña Victoria Eugenia. Su mujer era muy guapa, pero más vulgar".
Y esta es la historia de la familia cubana del rey emérito. Se da una paradoja en toda esta situación, en la que yo no había caído y que escuché ayer en la radio. Don Juan Carlos carece de liquidez ahora mismo, al haberle retirado su hijo la asignación, y no poder tocar ni un euro de sus supuestas cuentas en paraísos fiscales, debido a la situación que atraviesa, en el punto de mira de la fiscalía del Supremo y de la fiscalía del Cantón de Ginebra. Tanto es así que sus amigos españoles, hicieron una colecta para proporcionarle cash, y poder alquilarle una casa en Madrid, caso que quiera regresar. Mientras tanto tiene que ser acogido por sus amigos del exterior.
Tiene gracia la cosa, no me digáis.
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