Nueva normalidad


Desde los días de encierro y tras unas fases de desescalada, un palabro que no se de donde salió, (en realidad si lo se, es una mala traducción del verbo inglés de-escalate, reducir o disminuir), hemos llegado a la mal llamada nueva normalidad, digo mal llamada porque no es normalidad como tal, es otra fase por la que transitaremos hasta que haya una vacuna, en el mejor de los casos. Una vez vacunados, esperemos que con la vacuna correcta, entonces sí, volverá la nueva normalidad.

Este periodo o fase que yo  llamo de anormalidad, vendrá determinado por el uso de la mascarilla, que se ha incorporado a nuestras vidas, como una parte más de nuestro atuendo, para la que ya existe el diseño, faltaría más, y porque vamos a tener las manos más limpias que tuvo jamás la humanidad. Otra determinante será la distancia social. A mi, que tanto abrazo y tanto besuqueo sin conocerte de nada, ya me estaba pareciendo excesivo, y esta afición de los seres humanos por socializarlo todo, sin dejar nada para la intimidad, y de vivir casi en la calle, o en un escaparate estilo Lennon-Ono, me estaba desbordando, esta parte distanciada me va a gustar.



























Con sentido del humor y, sobre todo, con sentido común lo iremos llevando bien. Que la fuerza nos acompañe, hasta la próxima que tengan a bien mandarnos. Siento curiosidad por saber que será...





Encierro, Ernesto Guevara Lynch




Si, el Che Guevara tenía ascendencia irlandesa.

Un antepasado suyo Patrick Lynch, nacido en Galway, fue el segundo hijo del capitán Patrick Lynch, de Lydycan Castle,  y de su esposa Agnes Blake. Los Lynch Blake, fueron  uno de los catorce clanes de Galway, que dominaron la vida política, comercial y social del oeste de Irlanda desde el siglo XIII, hasta que tras la derrota a manos de Cromwell, en las famosas guerras de religión, perdieron sus tierras y sus privilegios.

Desde entonces, diferentes miembros de la familia, comenzaron a huir de Irlanda. Patrick lo hizo en 1740, hacia Bilbao, para viajar desde allí, a la colonia de Río de la Plata, más tarde Argentina. En 1749 se casó en Buenos Aires con Rosa de Galayn, heredera de una familia muy adinerada. Uno de sus bisnietos, Francisco Lynch, fue a su vez, bisabuelo del Che.

Esta familia, de clase media alta, desempeñó papeles relevantes en la historia de Chile y de Argentina.

El padre del Che, Ernesto Guevara-Lynch, siempre justificó la ideología revolucionaria del hijo diciendo: Lo primero a tener en cuenta es que por las venas de mi hijo fluye la sangre de los rebeldes irlandeses.


El Eire también reconoce la ascendencia irlandesa del Che, y por eso, en 2017, con motivo del cincuenta aniversario de su muerte, la Oficina de Correos de Irlanda emitió un sello con su imagen, decisión que causó cierta polémica en el país.

También el exilio cubano en Miami, puso el grito en el cielo, arremetiendo contra Irlanda y contra la figura del revolucionario argentino,  a quien llamaron “asesino de masas y fracasado en todo lo demás que hizo, porque el mito en torno a su figura es solo propaganda comunista”.

No obstante, el sello se emitió con la famosa imagen creada por el artista dublinés Jim Fitzpatrick, a partir de la foto del Che tomada por el fotógrafo cubano Alberto Diaz “Korda” en La Habana el cinco de marzo de 1960.


                                                  






Encierro, I can´t breathe





“No puedo respirar”, eso decía a los policías que le estaban deteniendo, el ciudadano de Minneapolis, George Floyd, mientras uno de ellos le presionaba el cuello con la rodilla. 

Todos sabemos lo que ocurrió después, y como una vez más se desató la furia en los Estados Unidos por un nuevo caso de racismo y de violencia policial contra la población negra. 

Me contaba mi padre, cuando yo era niña, algo que me sorprendía mucho. Cuando de joven viajaba desde La Habana hasta Illinois, donde estudiaba, en uno los estados del Sur, en el cual se detenía para visitar algunos parientes,  los negros viajaban, todavía, en la parte de atrás de los autobuses separados por una mampara del resto de viajeros,  y cierta vez que  entabló conversación con un chico negro de su misma edad, que esperaba también el autobús, vino un policía e increpó al negro de muy malos modos, por atreverse a hablar con un blanco; a él también le prohibieron los parientes hablar con los negros por la calle. Esa mentalidad, que tanto me sorprendía entonces, sigue vigente en el país, y como acabamos de ver, no sólo en los estados del Sur. El racismo y la afición por las armas de fuego son los grandes problemas de la sociedad americana.

Para completar el despropósito, Thrump, se autoproclama el presidente de la ley y el orden y amenaza con lanzar el ejército contra los que él llama izquierda radical, mientras se dirige a la iglesia con la Biblia en la mano, que estoy segura que no ha leído nunca.




Ocurre que en Norteamérica, el ejército no puede ser empleado contra el pueblo, a no ser que se trate de una secesión o una obstrucción contra la autoridad de los Estados Unidos. El presidente solo puede sacar el ejercito a la calle en la ciudad de Washington, porque tiene un status diferente y carece de autogobierno, pero en el resto de los 50 estados es la Guardia Nacional la que cumple la función de mantener la ley y el orden, en casos excepcionales,  y tiene que ser el gobierno de cada estado quien lo autorice. El presidente no puede interferir.

Un mecanismo parecido deberían tener los partidos políticos, Republicano y Demócrata, para impedir que personajes como Thrump, puedan ser candidatos a la presidencia y ganar, además.

Nada mejor para ilustrar la situación de ahora mismo en USA, que el artículo que escribió George Clooney, y que se hizo viral, como se dice ahora, en pocos minutos. Voy a reproducir algunos de los párrafos más significativos.


“No sabemos cuándo acabarán estas protestas. Esperamos y rezamos para que nadie más sea asesinado, pero también sabemos que muy poco cambiará. La ira y la frustración que vemos una vez más en nuestras calles es solo un recordatorio de lo poco que hemos crecido como país desde nuestro pecado original de la esclavitud.

Esta es nuestra pandemia, nos infecta a todos y en 400 años todavía tenemos que encontrar una vacuna. Las palabras no puedo respirar quedarán grabadas para siempre  en nuestras mentes-

Necesitamos políticos que reflejen la equidad básica para todos sus ciudadanos por igual. No necesitamos líderes que aviven el odio y la violencia, como si la idea de disparar a los saqueadores pudiera ser algo menos que un mensaje controvertido. Y solo hay en este país una forma de lograr un cambio duradero: votar”.

Votar sí, pero votar bien, añado yo. Que no vuelva a ganar el mismo personaje. El resto del mundo no podemos votar en las elecciones USA, solo sufrimos las consecuencias, y ya estamos hartos de depender de locos ajenos. Necesitamos respirar también.




























Encierro, postres y bebidas cubanos



En la isla de Cuba, existe una gran tradición repostera, no podía ser de otro modo en el país de la caña de azúcar, donde existe, también, una amplia producción de frutas tropicales, para hacer confituras, rellenos, o servir de base a la confección de dulces en las cocinas y en las pastelerías.

El postre es una costumbre nacida en los monasterios andaluces y fortalecida en Cuba por los esclavos africanos confinados mayoritariamente en los ingenios azucareros. Su dieta era, por eso, muy rica en azúcares, que producían mucha energía para el trabajo duro que llevaban a cabo. De ahí dicen que les viene a los cubanos su preferencia por el dulce, que hoy en día produce una acumulación de energía innecesaria, que se convierte en grasa nada buena para la salud.
 
No obstante, en Cuba los "platícos de dulce" son la expresión de sus tradiciones, ningún cubano renuncia a ellos, aunque en los restaurantes, procuran ponerles menos azúcar para adecuarlos a los gustos de los visitantes y para que sean menos nocivos para la salud. 


 Platícos de Dulce


Mermelada de Guayaba





A mi me encanta. La guayaba tiene un ligero sabor a yodo, que hace buena mezcla con el azúcar, no empalaga.



Flan de coco





Bolitas de coco





Boniatillo




A mi, me encanta el sabor del boniato, por eso, esta crema es una de mis preferidas. Lleva canela por encima y puede llevar coco. 



Buñuelos de yuca y malanga





Arepas






Tortas de harina de maíz. Son precolombinas y originarias de Colombia y Venezuela. Al servirlas se les rocía con almíbar o con miel de abeja.


Merenguitos









Panetela




La panetela es muy sencilla de hacer. Dicen que el secreto está en como se mezclan los ingredientes. En mi casa siempre se hizo y a mi y a mis primos nos gustaba para desayunar o merendar, mojada en café. A los mayores, todos nacidos en Cuba, esa práctica  les pareció siempre un sacrilegio.

Además de este muestrario, se hacen flanes de todos los sabores, arroz con leche, bienmesabe, dulce  de leche, y como no, turrón, preferentemente de maní.




Bebidas







El ron es la bebida nacional de Cuba; en la isla, concretamente en Santa Cruz del Norte, se produce uno de los rones más valorados del mundo:, el Habana Club, pero hay otros muchos: Santiago, Mulata, Caney, Ritual…

Lo mismo que con la comida ocurre con la bebida. Alrededor del ron y de la caña de azúcar, surgen multitud de combinaciones. 






Guarapo


Bebida dulce y refrescante, obtenida al prensar la caña de azúcar.



Batido de mamey






A los cubanos les encanta el mamey, aunque ahora es una fruta cara y difícil de encontrar. En cualquier casa del campo cubano donde tengan un mamey, es fácil que pongan un puesto para venderlo al lado de la carretera. El mamey consumido como fruta tiene, para mi gusto, un sabor demasiado dulzón, pero en batido está buenísimo.



Mojito




Ron blanco, azúcar moreno, hierbabuena, zumo de lima y agua carbonatada.


Negrón 




Variedad de Mojito con miel en vez de azúcar y albahaca en vez de hierbabuena. Lo sirven, casi exclusivamente, en el Callejón de Hamel en La Habana. El Callejón es el centro de la cultura afro-cubana.




Si pides un negrón en cualquier otro sitio, fuera del Callejón, te gastarán la broma y te vendrán con un negro de carne y hueso. Los cubanos tienen mucha guasa.


Daiquiri 




Originario de Santiago de Cuba. Ron blanco y zumo de limón. Hay una variedad: Daiquiri frappé de fresa, que a mí me gusta mucho más. 


Canchánchara 



Aguardiente de caña de azúcar, agua, zumo de limón y miel. Si te lo sirven en una güira de coco seco, te crees que estás en la selva. Lo más corriente es en una vasija de barro con forma de güira.



Café cubano





A los cubanos les encanta el café y, en consecuencia, lo hacen muy bueno. Fuerte y de sabor marcado. 
El café llegó a la isla en el siglo XVIII y desde entonces se cultiva en el país. En muchos sitios te lo sirven con una cañita de azúcar.